Libre descarga: «Aniquila las estrellas por mí» de Andrés Felipe Escovar #cienciaficción

Imagen de portada: Anbilli, Andrés Beltrán
PALABRAS PRELIMINARES A ANIQUILA LAS ESTRELLAS POR MÍ.
Todo lo que hacemos los humanos es humano, esa es la conclusión de J. Pedraza de las palabras malvadas de la enana Mireya; yendo más allá, piensa, incluso la caca es humana; incluso, pienso, los libros que escribimos los humanos son tan humanos como la caca. En esta aceptación, cuando hay humildad y nobleza, existe una liberación feliz en la que se deviene extraterrestre; como la sonrisa de un abuelo desmueletado incapaz de renegar el resultado final del arrasamiento de una cosecha por culpa de una helada cósmica. Y solo desde la profunda tristeza que nos exhorta esas estrellas adheridas al firmamento —como las garrapatas al cuero de una vaca muerta—, que nos impulsa tanto como a querer morir como a acometer una empresa de destrucción galáctica, se abre un Universo de improbabilidades solo posibles a través de las palabras que juegan —encerradas en la carpa del circo escrito— a que el juego se acabó y es hora de la rendición de cuentas final ante un tribunal Panafrosoviético. Lleno de personajes entrañables —de tripas corazón, en donde el corazón es una vida de mierda y las tripas son un corazón vencido de grasa y dolor—, escenas tan fantásticas como el deseo de no querer levantarse más y exiliarse al final del infinito; y versos que salen culposos como la consciencia de estar viviendo; Aniquila las Estrellas Por Mí, es el deseo de Andrés Felipe Escovar, de comprender y ser comprendido por su propio país. Mismo deseo que compartiera años atrás el poeta Afrosoviético, Vladimir Maiakovski, expresado con la misma actitud fiera de si acaso fracasara en el intento, quedará la dicha de instalar el fresco vaho de una lluvia oblicua que pasa sobre una tierra natal que es la de una nueva forma escrita.