Y Wilhelm Reich dijo: ¡Hágase la lluvia!
La figura de Wilhelm Reich ha sido una de las más polémicas del siglo que pasó; desde su distanciamiento de la escuela psicoanalítica, hasta sus textos en los que hace referencia a la represión sexual que opera en sistemas económicos como el capitalista, su teoría del orgón y sus últimos días en los Estados Unidos donde, a manos del Macartismo, fue etiquetado como esquizofrénico y sus textos fueron tirados al fuego, lo han convertido en un misterio que hace preguntarnos por los límites y la ortodoxia del discurso científico. Además, su corte de pelo y la ridiculización que sufrió a manos de las instituciones más sectarias de norteamérica, lo emparentan con esa caricaturesca figura del científico loco que desvaría. Entre sus muchas investigaciones, Reich afirmó haber construido el «Cloudbuster», una máquina que servía para hacer llover y que, por lo tanto, habría de ser fundamental para luchar contra las hambrunas. Este es un cortometraje que recrea lo ocurrido en aquella sequía de 1953 en Maine: