Llegarás tarde a la playa (primera entrega)
Presentamos «Llegarás tarde a la playa, una novela escrita por el autor ecuatoriano Edison Delgado Yépez. De este mismo autor, milinviernos ya ha publicado otros dos trabajos: “De Chuyuipe a Canoa” y “La necesidad del corazón”.
A Jean Pablo Péndola,
con amistad y gratitud
La esencia de toda actitud verdaderamente profunda ante la vida está en comprender, o por lo menos en tratar de comprender la naturaleza y las limitaciones de lo que puede el hombre pretender de Dios, de la vida, del prójimo y de sí mismo, y en aceptarlas con ecuanimidad.
Paul Radin
Empezamos necios y nos hacemos cuerdos por la experiencia.
Proverbio Masai
El interior del espíritu de un escritor que trabaja duramente tiene que estar tan lleno de corrosión como una caldera oxidada y tal vez lo que pretenden encontrar antes de morir es un poco de aceite en la esencia del tiempo mudo.
Norman Mailer
Prólogo
No duermas demasiado.
Tu palo de cavar cayó al agua y tu cesta también.
¡Despierta!
Es casi la bajamar.
Llegarás tarde a la playa.
Poema Kwakiutl, de Columbia Británica
Ahora que he muerto, puedo verte con mayor claridad. Como aquel día que presencié en el departamento de un amigo un show de pasarela de transexuales en trajes de baño, peinados y maquillados a la perfección. Y le pregunté, al dueño del departamento en Salinas, si éstos en realidad eran maricas y la respuesta fue no. ¡Qué bien pasamos aquel día! Llenamos de cerveza toda una olla gigante para cocinar cangrejos y bebimos hasta llegar al límite y luego pasamos de aquel límite y ¡explotamos!
Me encontraba de visita en un hermoso hospital de madera, pintado de blanco, posiblemente de la Cruz Roja. Desde donde estaba se podía oler la frescura del mar.
Todo el mundo tenía miedo a una catástrofe, un macrosismo, un maremoto y yo me encontraba caminando en busca de tu dulce rostro. Pasaba entre pabellones y pabellones con cuartos repletos de almas que recién llegaban de la Tierra.
Y de pronto me encontré con esta simpática mujer, loca, hermosa, rubia, que se me pegó a mí costado, siguiéndome y mirándome fijamente, cogida de mi brazo y que me preguntaba un montón de cosas. ¿Que cómo había llegado?
Las camas de hierro también estaban pintadas de blanco y blanco era el color del techo, de las paredes y de las sábanas.
Todo lo que quería era encontrarte y estar junto a ti antes de que ocurriera lo que tenía que pasar y que todos temíamos que acontezca. La explosión de una estrella y su siguiente transformación en un agujero negro.
¡Dios, qué hermosa que es la playa vista desde el cielo!
La destrucción de la materia da paso a una transformación en el impulso vital que es nuestra alma y temperatura corporal a un nuevo mundo de sensaciones. Todo se trata de imágenes que te atrajeron durante la vida terrenal. Pude ver un horizonte que poseía un sol decadente que manchaba de rojo el firmamento.
Un poema de Amón-Hetep vino a mi mente:
Cuando te acuestas en el horizonte occidental,
La Tierra yace en la obscuridad como
Si hubiese muerto.
Los hombres duermen en sus alcobas
Con la cabeza apoyada y un ojo no vé al
Otro;
Si alguien roba todas las cosas preciosas
Que otros guardan bajo la cabeza, no
Lo advierten.
El león sale de su cubil
Y todas las serpientes muerden;
Fría es la obscuridad
Y la Tierra yace en silencio,
Porque el creador reposa en su
Horizonte.
Cuando uno muere viste todo de blanco, se experimenta una paz y tranquilidad infinita y la playa brilla con la luz del sol, la arena resplandece, ¡pero esta loca, tan hermosa, ocurrida y divertida que camina conmigo no me suelta un instante y perturba mi búsqueda!
¡Es importante que te encuentre y que conversemos!
De pronto ocurre aquello que todos temíamos. Es como una gran sacudimiento, un terremoto estelar y ya no estoy contigo sino que junto a mí se encuentra el ser equivocado, esta hermosa loca que se ha puesto delante de mí, me ha llevado a un rincón, me ha desabrochado los pantalones, me ha desnudado y me ha practicado el sexo oral hasta hacerme terminar.
¡Qué curioso y terrible es todo esto!
Caminas junto a mí y te ves tan hermosa.
La playa, no sabría decir cuál de todas es donde nos encontramos. Pero es la representación más sublime del cielo que he visto en toda mi vida. Pero también están las imágenes veladas de un ir trashumante en busca del bar de streap tease perfecto. Oculto en la fachada de un condominio y al abrir la puerta, ¡zas!, un perfecto bar tipo años 40’s con una excelente cafetería y pastelería. Y te buscaba Ana para intercambiar una propina por uno de tus famosos besos, pero todo fue inútil nunca te encontré. Pero encontré la arquitectura más hermosa, el servicio privado más sutil y personalizado. Era un bar donde todos conocían mi nombre.