La propulsión a chorro de Tom

Por Anbilli
Ante el poderío de Nairo Man, Doumolin tuvo que simular una diarrea para así evitar el ataque que se le venía encima: esta es la teoría de algunos fanáticos que aún no encajan las razones por las cuales su ídolo terminó en el segundo lugar de la clasificación general del Giro de Italia.
Gracias a esta sospecha, nos permitimos proponer los siguientes puntos que, si se hubieran aplicado, no habría lugar a ninguna duda sobre el resultado final de la primera Gran Vuelta de este año:
- Los comisarios debieron cerciorarse de la deposición de Tom; es decir, luego del incidente, era muestra de total diligencia el que se hubieran bajado de sus motos a mirar si había una diarrea diseminada por el pasto de la cuneta de aquella memorable carretera.
- Si no era posible una detención de los comisarios, las autoridades competentes, a la llegada a la meta del holandés, pudieron revisar las nalgas del mismo o su culotte para atisbar rastros excrementales que evidenciaran la penosa situación por la que atravesó el atleta.
En consecuencia, es imperiosa la necesidad de una reglamentación en donde se contemple que, todo ciclista que esté en puestos de importancia en una competición ciclística de ruta, debe defecar encima, como lo hicieron, entre otros, los ilustres Greg Lemond o Jan Ulrich, quienes llegaron con chorros marrones que empapaban sus afeitadas piernas.
Fausto Coppi: El gran héroe italiano del siglo XX
Cuando Fausto Coppi cayó preso por el ejército inglés en el norte africano durante la segunda guerra mundial ya era campeón del giro de Italia. En su prisión se figuró el retorno a las carreteras, el ascenso por sinuosas rutas que lo llevaron a la cima del ciclismo, ese deporte que sólo pudieron haber practicado los místicos de otros siglos. Lo apodaron la garza real y el día que murió muchos dijeron que plegó sus alas, después de tantos vuelos triunfales por una Europa destruida que volvía a levantarse. Les presentamos un documental sobre su vida, tan acompasada con la posguerra italiana y sus sueños encarnados en ese héroe casi invencible y de frágiles huesos:
Ciclismo, el minucioso ejercicio del sufrimiento
En 2011 Michael Robinson hizo un documental sumergiéndose en el equipo Movistar durante la vuelta a Italia. Al comienzo se afirma que la peor época del deporte ha pasado; se creía superado el terremoto del doping. Poco tiempo después, Alberto Contador, el ganador de la vuelta, A perdió el título de ganador por uso de Clembuterol en la temporada 2010. Este año 2012 ha ocurrido otro remesón: El Caso de Lance Armstrong. Pese a todo ello, el ciclismo continúa; su pelotón, hecho de voluntades asmáticas e invencibles, se fortalece con los golpes. Vocación de sufrimiento: la capacidad de ascender el Gólgota en una bicicleta. Santos dopados, pero santos al fin y al cabo.