El retratista centenario
En el siglo XX las ciudades se escribieron y se retrataron. Algunas de ellas tuvieron un efecto que las convirtió en lugares de visita obligada porque se las consideró especiales.Así como París se adelantó y su hechizo se comenzó a construir desde el siglo antepasado, otras, más jóvenes pero con rictus de centenarias, se hicieron, no sólo telón de fondo, sino personajes principales de las tramas. Este es el caso de Buenos Aires, lugar tantas veces aparecido en escritos de Borges, Cortázar, Mujica Lainez y Sábato, por mencionar los que más aparecen en los suplementos culturales del mundo. Como todas esas ciudades que ejercen hechicería, Buenos Aires contó con su retratista: Horacio Coppola que murió hace un par de días, a sus 105 años de edad. Con él se mueren los resquicios de ese ideal de ciudades encantadoras que se ha ido eclipsando en el presente siglo. A continuación, una pequeña muestra del trabajo que hizo Coppola: