Tag Archive | EL quinto elemento

José José, el alienígena que se emborrachó de gloria

El plagio por anticipación ocurrió en 1970 cuando José José salió al escenario donde se llevaba a cabo el segundo festival latino de la canción. Su cabeza coronada por un exiguo copete y su abrigo verde, sugería un alienígena que cantaba para saborear su dolor. El público, mientras la música de la banda retumbaba con agonía, aclamaba al extraño cantante, tirándole flores como si fuera un torero que lidió con una bestia paradimensional.

El plagio se evidencia en El Quinto elemento; una cantante azul, proveniente de otro planeta, canta en una nave espacial que, como un crucero del caribe, se atesta de turistas espaciales y es el escenario de la refriega en que se pone en juego el futuro del cosmos.

En la aeronave de José José no se puso en juego el infinito pero hubo flores psicodélicas y compositores latinos que escucharon con atención al extraño. Poco tiempo después, el alienígena cantó La nave del olvido, proclamando así el mutismo al que se sometió ese viaje sideral que no fue comandado ni por norteamericanos ni soviéticos.

El cantante extraterrestre tuvo el atrevimiento de enamorarse de una terrestre y de concebir un par de hijos. En  ese tiempo también supo de las tretas y las trampas del ritual de seducción, pudo entender la naturaleza del planeta que visitaba y cantó canciones en las que equiparaba el comportamiento humano con el de los demás animales terrícolas, como lo hizo con «Gavilán o Paloma».

La voz de José José fue un eclipse y, como todo eclipse, se fue desvaneciendo. Se entregó a la bebida y al consumo inusitado de otro tipo de drogas; algunos presumen que experimentaron nuevos fármacos siderales con el cantante, otros, adjudican al estres que implica vivir en otro planeta, su entrega a esas sustancias.

Sus borracheras no fueron suficientes para aplacarlo. Apareció en películas donde hizo gala de su fervor por la bebida. Sabía que ello precipitaría su caída en un abismo casi tan profundo como los que hay en los mares de su planeta de origen.

Entonces, su voz se rompió. Él dejó de beber alcohol y siguió cantando. Ni siquiera Tom Waits tiene una voz tan ronca como la del alienígena José José.