Memazos del 2013
Un año que viene y otro que se va. El 2013 fue otro año que se fue con todo y memazos. Memes que en ocasiones ejercieron su función como puntuación de Mil Inviernos. También sirvieron para comunicarnos con nuestros seguidores en redes sociales, de una manera menos formal que a través del estricto texto que nos esmeramos en subir y seleccionar directamente en la página web.
Estos son los memazos con los que se fue el 2013, mientras esperamos que el 2014 venga con sus respectivos pepazos:
- Tres consejos de un hacker suicida: Aaron Swartz http://milinviernos.com/2013/01/13/tres-consejos-de-un-hacker-suicida-aaron-swartz/
- «Me la hiciste tragar toda, pillo» Fragmento de Tríptico de Verano y una mirla.
- A celebrar por el natalicio de Edgar Allan Poe y el primer aniversario de Mil Inviernos (19 enero)
- El arte poética de los Rolling Stones
- RGG
- De la sabiduría de Eclesiastés
- Una marica llamada Genet
- Life of Pi
- El gran poeta argentino del siglo XX
- Felices 204 años, Charles Darwin!!!! http://milinviernos.com/2013/02/12/la-cabeza-teologica-de-charles-darwin/
- Se cayó el meteoro y Cioran, Juan y Sánchez Merlano nos dan sus impresiones http://milinviernos.com/2013/02/15/el-meteorito-segun-juan-cioran-y-sanchez-merlano/
- Wanda Uribe Villa muere tres veces en esta serie de fotografías. http://milinviernos.com/2013/02/16/las-tres-muertes-de-wanda-uribe-villa/
Documentales sobre el bazuco, el espectáculo de la miseria humana
El bazuco, conocido como pasta base de coca, es un misterio. La degradación tanto física como social que esta sustancia ejerce es bien conocida, tanto para quienes la prueban como para quienes ven en ella una puerta de entrada a un mundo de horror. Por esta carga de misterio existe una fascinación, más que por la sustancia, por los individuos que se pierden en el consumo y terminan sus vidas de maneras tristes. Esto lo aprovechan realizadores de cine, sin escrúpulos, que ven en la miseria humana el pretexto para echar a rodar sus prosaicas cámaras, y bajo esta idea, tratar al consumidor como una vedette de los aspectos más oscuros de la condición humana, y para servirse de este espectáculo triste proveerles de la sustancia así como atosigarlos de pan y aprovechar su hambre para sacar un testimonio para vender como documental en el exterior.
Pedro Sánchez Merlano, un día ante la genialidad literaria.
Por: René Alvarado.
Pedro no tiene malos recuerdos porque su desdicha es presente. Llego a su departamento en el barrio Veinte de Julio de Bogotá. Son las 12 del día pero en casa del escritor parecen las 12 de la noche. “Eso fueron esos hijueputas edificios que taparon la vista”, reniega Sánchez Merlano, señalando la ventana que se abre como la boca negra de un africano.
– Hace mucho tiempo había mucha luz, pero ya ve, las cosas cambian.
Por hacerle un guiño literario le digo que el fútbol también muta y su amado América está en la B.
– Y para siempre. Eso sí no volverá a cambiar. Es muy difícil recuperarse de la derrota. Y los americanos lo sabemos; no somos como esos hijueputicas de otros equipos y esos escritorzuchos que dicen que lo que más les gusta de este deporte es el sufrimiento. Como dice Irving Welsh, es muy fácil filosofar cuando la mierda está en las venas de los otros. ¡Ah épocas! Se acabó el cartel y todo se fue para el carajo. Antes me la pasaba oliendo perico y por eso escribía mucho, porque no dormía, ¿me entiende? Ahora que no hay cartel, eso se puso muy caro y muy feo y ahora no puedo sino meter bazuco, y eso me pone a dormir. Ya casi no escribo y ando inapetente, en todos los sentidos. Si no, pregúntele a mi mujer.