QUEREMOS MÁS: A PROPÓSITO DEL SEXTO ANIVERSARIO.
2.191 días de desengaño, desde la primera entrada de Mil Inviernos. Estamos dichosos, jamás las puertas se nos han cerrado en la cara de manera tan hostil como ahora. Y queremos más clausuras. Tenemos el perrenque para continuar con las desdichas, propias de gente dichosa como nosotros. Dichosos de la impotencia, dichosos de la ignominia. Sedientos de más respuestas negativas a nuestros proyectos, que son muchos, el horizonte nunca se vio peor pero nosotros reímos sin muelas, porque el desorden de pánico da carcajadas.
¿En qué momento se nos envejeció Mil Inviernos?
Desde siempre, mi amor.
Las cosas van en declive. Ahora casi nunca hay entradas en el blog, poco memazo y mucha indiferencia ante todo. Antes peleábamos. Ahora nos entregamos como el cuello de una gacelita que deja de moverse entre las fauces de un leopardo. Es que nos gusta mucho los animales, es lo único que queda: Animal Planet.
Nuestro proyecto es hacer un reality de escritores para Animal Planet Channel. Los mezclaríamos a partir de los guetos de procedencia: de tal manera que el anarcocapitalista se encuentre con la feminista académica y el realista socialista conviva con el geek de la sci-fi; y de algún Douglas Coupland de Guatemala.
Será un momento de locura, los jurados serán, a saber:
- China Mieville.
- Rodrigo Fresán.
- El Topolino Zuluaga.
- Aura Cristina Geitner.
- Paulo Coelho.
- Mario Vargas Llosa.
Como ven está lo más curtido de las letras mundiales.
Mil Inviernos avanza hacia el abismo. Es un vehículo tan viejo como el Perú. Nosotros vamos en él aguardando el choque con el final del precipicio. Vivimos en la holgura de una fantasía de alguna vez haber estado en el pináculo, pero siempre hemos estado en el final del precipicio.
pdta:
El presentador del reality será Enrique Vila-Matas, y el toque sexy del programa lo aportará Pola Olaixarac, con su discurso cyberpunk de wikipedia.
Y si hay problemas desde los estudios de género, podemos revivir a Pedro Lemebel para que haga sus escandalinas y todos sepamos que somos tan maricas que de lo maricas no pudimos serlo.
La humildad seguirá siendo nuestra marca de agua y nuestra condena de fuego, porque basta con ser humilde para que todos los hijueputas lo traten de humillar a uno.