En la cama con Juan Carlos
Juan Carlos Onetti estuvo en cama la mayor parte de su vida; el cansancio y el tedio le podían. Tan fuerte era su aburrimiento que, hasta en las entrevistas , el mutismo se insertaba entre sus frases, como si se cansara de hablar y recordara que no hay mejor lugar para esperar a la muerte que la cama propia. En la entrevista que hoy les presentamos, Onetti está sentado en su cama pero bebe whiskey y está muy dicharachero, alejado de todos esos discursos literarios que se preguntan por la sustancia del acto de escribir y por lo que es literatura (discusiones que solo interesan a los escritores como a los contadores los libros de contabilidad y a los abogados el régimen de propiedad horizontal y la Sociedad en Comandita Simple):