Crimen y castigo, la película
En esta película dirigida por Von Sternberg (1935), los personajes se visten como ciudadanos de alguna urbe de los Estados Unidos, hablan como gringos y de no ser por los nombres, jamás se encontraría una relación con la Rusia en la que se desarrolla la historia escrita por Dostoievsky. Esa inverosimilitud inicial es la que tanto animó a Jorge Luis Borges quien en sus críticas de cine hechas en la revista Sur, aprobó el trabajo cinematográfico de Sternberg e, incluso, confesó que vio esta película pero que aún no había leído la novela.
Para el momento que el director de origen austriaco hizo este trabajo ya cargaba con el lastre de su más rotundo fracaso: «El diablo es una mujer», protagonizada por Marlene Dietrich, la actriz con la que tuvo tantos éxitos que precedieron a esa caída.
El actor que interpreta a Raskolnikov es Peter Lorre, quien, con su cara gordita no parece haber pasado muchas penurias alimenticias. Sin embargo, muchos entendidos del cine, comparan su trabajo actoral en esta película con el que realizó en «El vampiro de Dusseldorf» (Fritz Lang, 1931).