Tapachula mon amour #2
La coyota transportapueblos es un homenaje a las migraciones, hoy día alimentadas por personas que se aferran a la idea de haber llegado al último país que los separa de Estados Unidos; al lado de la madre reposa su cría, a un costado de la vía del ferrocarril “la bestia”. Hace unos días las incendiaron; persisten sus esqueletos y algunas placas de madera.
El fuego y quien lo propició han erigido una nueva hospitalidad. Habrá más incendios.
Tapachula mon amour # 1
A mediodía, la temperatura será de 35 grados y lo que llaman sensación térmica se acercará a los cuarenta. Para calcinarme me encierro, aunque no lo hago con decisión: en el techo hay un ventilador que me alivia y quisiera sentirme en una ciudad vietnamita como Sheen en Apocalypse Now. Aunque mis días no semejan a aquella incursión al horror; los míos son familiares, sin peligro: son un capítulo de La rosa de Guadalupe, pero sin milagros. El escritor de esa serie, Carlos Mercado Orduña, nació en Tapachula y es uno de los orgullos de la ciudad; cada tanto lo entrevistan para que dé una lección donde se evidencie que el triunfo se basa en el trabajo y el sacrificio: nunca hay obsecuencias, ni tramas para trepar; el mundo es un lugar donde se premia al mérito.
Opto por guarecerme en la casa donde vivo, para apenas imaginar los trámites burocráticos que ocurren en los diferentes despachos migratorios. En esta ciudad comienza el último obstáculo para las personas que buscan llegar a Estados Unidos. En automóvil, estoy a unos veinte minutos de la frontera con Guatemala, la cual la franquean por el puente o a través del río Suchiate, muy breve en su profundidad y anchura como el Suchiate. La vía acuática no precisa de algún control migratorio mientras que la terrestre sí. Y los agentes de migración saben lo que pasa abajo y, los de abajo, saben lo que ocurre arriba. Read More…
Reportaje gráfico expedición botánica de Ecowatchers por Canal Salitre
En compañía del Jardín Botánico de Bogotá y las Organizaciones comunitarias del bosque urbano Brazo Salitre se realizó el día 19 de enero, un ejercicio de ciencia ciudadana inventariando, caracterizando y aprendiendo de la flora del bosque a la vez que realizamos una “pajareada” identificando la avifauna del territorio y sus servicios ecosistémicos.
La socialización de la veeduría ECOWATCHERS arrancó en el portal Siete de Agosto de Transmilenio, a las 7:30 am, en el emblemático barrio de la localidad Barrios Unidos que poca gente asimila con actividades ecológicas debido al maltrato ambiental que ha sufrido por la actividad económica que ejerce en el área de la tecnomecánica de automóviles
Desde allí empezamos una expedición botánica respaldados por el docente Andrés Meneses del Jardín Botánico y al mismo tiempo una pequeña actividad de pajareada para no pajareros, aprovechando los puntos calientes que la líder del sector, Carolina Moreno, nos indicó previamente, en donde más se observan especies.
Gran Expedición Botánica en el Bosque Urbano Brazo Salitre con ECOWATCHERS
¿Sabías que actualmente están consolidados 21 bosques urbanos en Bogotá❓🌳🌳🌳
Seguimos reconociendo la red de bosques urbanos presentes en toda Bogotá; la Veeduría ambiental ”EcoWatchers: Somos los ojos de la justicia ambiental» invita el próximo Viernes 19 de enero a partir de las 7:30 AM a la Gran Expedición Botánica en el Bosque Urbano Brazo Salitre
En compañía del Jardín Botánico de Bogotá y las Organizaciones comunitarias del bosque urbano realizaremos un ejercicio de ciencia ciudadana inventariando, caracterizando y aprendiendo de la flora del bosque a la vez que realizaremos una “pajareada” identificando la avifauna del territorio y sus servicios ecosistémicos.
Finalmente expondremos el resultado de nuestra veeduría con el fin de seguir trabajando de la mano con las comunidad por una Bogotá más verde y natural
Para inscribirte debes diligenciar el siguiente formulario o escanear el código QR de la imagen:
https://forms.gle/xe9v7NsKsYe3KP1N7
Organiza: EcoWatchers
Apoya: Jardín Botánico de Bogotá, Paquerxs unidos, Red brazo y humedal salitre, Huerta Comunitaria Muyso, Red humedal Salitre, Caminando el Territorio , Librería El Reino, Efecto Mariposa y EcoHills Bogotá.
ACTIVIDAD SIN COSTO!!!
Los esperamos!!!
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El agente secreto de Cordwainer Smith
Una charla con el colombiano que más estuvo cerca del célebre escritor de la science fiction.
En el Gabinete del Dr. Antonio Marín reposan sus memorias, antaño vertidas en letra de molde en la Editorial Moderna. Hogaño, se dispone a hablar con nosotros, que lo hemos buscado gracias a nuestra afición por inkaporn, rezago del legendario canal cholotube. como arqueólogos de esas páginas productoras de tristezas y delirios matrimoniales, estábamos ávidos de conocer a don Marín; muy en particular, tras hacer conexión con él, a partir de un compañero de grupos de doce pasos (para los que no lo sepan son los doce pasos de los alcohólicos que ya no beben alcohol, los narcóticos que ya no le pegan a la merca, y los ludópatas que ya no se juegan la vida en los dados).
-Señor Marín, cuéntenos, cómo fue que llegó a la profesión de catador de videos para adultos.
-Es una historia larga. Todo comenzó desde el momento en que decidí dar un rumbo a mi vida y dejar atrás mi dipsomanía. Para ello debo remitirme a esa historia de mis años mozos. Fue en una fiesta en Planadas, Tolima. Contaba con unos 13 años. Mi tío Benancio procedió a embutirme guarapo mezclado con guaro y con ese nuevo producto que estaba en boga en aquellos gloriosos cincuentas: el perico. Era mi primera vez con esos insumos, y debo decir que fue mi última. Me puse a bailar y, en virtud de la inhalación desaforada del polvo, en mitad de una rajaleña, empecé a convulsionar moviéndome como un robot. Este baile fue la sensación de la noche sin que nadie sospechara que mis neurotransmisores estaban haciéndose papilla; lo que llamaban movimientos zurumbáticos no eran más que la antelación del infierno al que pude haber accedido de no ser por el regaño de mi mami. Fue tal la impresión que dejó en mí la vergüenza de que los niños, menores que yo, obviamente, porque yo también era un niño, afirmaran que mi nariz parecía una dona llena de dulce de mora pues se mezclaba el polvo blanco con el relleno de la sangre que se vislumbraba en mis ñatas. Desde ahí ingresé a los grupos de doce pasos. Y fue don Andrades Acosta quien me introdujo al mundo de la inteligencia militar, por la cual muchos años después accedí a mi trabajo como catador de contenidos informáticos. Huelga decir que soy el único colombiano que tuvo una relativa amistad con Cordwainer Smith.
-¿Cordwainer Smith? El famoso escritor de la science fiction?
-En efecto. Aunque yo lo conocí como mi principal entrenador de las guerras sicológicas. Él fue de los que primero me enseñó videos porno hechos en la Unión Soviética; en cada lamida, en cada gesticulación, en cada gemido, estaba el fantasma de Vladimir Lenin y el comunismo que escribió Marx hace más de doscientos años: porque, aunque ustedes no lo crean, eso del fantasma no era una descripción ni una metáfora sino una orden: fabricar fantasmas comunistas para el futuro.
-¿Era tímido Cordwainer?
-Pues figúrese que no era muy activo sexualmente, salvo con los videos yugoslavos. Ese hombre parecía tajarse el pene a punta de pajas y, con el líquido que le salía, se peinaba las cejas. Era raro Corwainer y buen tipo.
-Nos imaginos que como su ficción.
-Realmente yo ni siquiera sabía que ese señor escribía más allá de los informes solicitados por la CIA. Después fue que me enteré que hacía historias con sus conocimientos sinológicos y desvaríos. Muy travieso don Smith, pero, la verdad, yo siempre lo vi como mi mentor en las labores del espionaje más invasivo y sutil de la época.
– ¿Cómo pasó de Planadas a la CIA?
-Ya les dije que por don Andrades Acosta que, para esa época, era un asiduo seguidor de don Gullermo León Valencia. Acosta llegó una tarde al grupo de doce pasos, diciendo que estaba que se tomaba hasta el agua del florero. Yo lo detuve y él se sorprendió por mi entereza de dicieocho años. No puedo negarles que, al comienzo, creí me quería seducir pero, luego de varios diálogos, me refirió que mi talento podría ayudar a las causas de mi patria. Mi abstinencia demostraba una gran voluntad y capacidad intelectual. Por tanto, fui alistado en labores de inteligencia en el Palacio de Nariño. Debía, al principio, detectar quiénes hacían uso de la droga de la sagacidad, como la llamaban en ese entonces, y debo decir que fue relativamente fácil escudriñar las ñatas de los oficiales. Con la insipiente aparición del perico, aún tan desconocido en el país, fui asignado a la división de batallas mentales de la CIA en Washington para el año 1964. El director era don John McCone, y él me contactó con don Cordwainer, que, huelga decir, al principio también dudé de si no tenía otras intenciones conmigo porque era hombre de gustos refinados y maneras fementidas. Tal vez muchas para el típico agente de la CIA.
-Bueno, pero cuéntennos ahora en detalle, en qué consistía su oficio.
-Por intermediación de don Cordwainer, y debido a una vacante, me remitieron al comité de seguimiento de costumbres sexuales comunistas y ahí me nutrí de todo el cine para adultos hechos en la cortina de hierro, China, y los países africanos que cayeron en las fauces del comunismo. Mi labor consistía en percibir cuáles eran las sensaciones de erección que tenía con cada una de las escenas. Ahí llegué a un terrible descubrimiento: introducían toda la ideología a manera en que las escenas iban poniéndose cada vez más candentes. No es una mera coincidencia que le digan a ese cine, cine rojo. Porque, les juro. que de no ser por mi célebre fortaleza mental yo hubiera terminado en el ejercito de los jemeres rojos. Es que a uno hasta le daban ganas. Para mí, el libro rojo de Mao es un Kamasutra. Y la pregunta de Lenin de qué hacer tiene una sola respuesta: la paja.
-Pero, entonces, señor Marín, ¿un pajero es un comunista en potencia?
-Es un catador. Mi vida más feliz ha sido gracias a eso. Y no me ha impedido tener esposa e hijos. Uno puede estar disfrutando plácidamente la vida hogareña en la sala, y se ausenta unos breves instantes, se interna al estudio, mira un videíto de alguna húngara caliente, se deslecha, y sale a la rutina diaria como después de un relajante baño termal. Todos observan el cambio de ánimo y todos se alegran porque el viejo esté más tranquilo y contento. El día del entierro de mi esposa, me sacudí el chimbilaco tres o cuatro veces durante el sepelio y parecía un monje zen. Todos se admiraron de mi entereza pese al dolor. La cabeza es la loca de la casa pero también es la que nos salva de los comunistas.
-Para hablar de un tema de actualidad, que está dando vueltas al mundo, y del que usted tiene una palabra autorizada: la reciente muerte de Kissinger.
-Ese tipo era un doble agente . Y es sencillo. Kiss viene de beso. Inger de Finger. Ese tipo era puro beso negro y dedo. Fue uno de los más grandes comunistas que hubo en la historia. ¿Saben por qué? Porque sus guerritas hicieron sentir moralmente superiores a los zurdos de mierda. Y eso era porque él hacía trampitas en el miomento de autosatisfacerse. No le bastaba con tocarse el pájaro sino que se estimulaba analmente y luego cataba el sabor de su cavidad dándose besos en la yema de los desos. Puro Kissinger. El comunista. Miren, les voy a decir otra cosa: El partido Republicano es comunista. Donald Trump va a ser el próximo Stalin. Sus novias han sido actrices porno y porque su mujer es una actriz nacida tras la cortina de hierro. Ojo con lo que les digo. La CIA tiene que hacer una purga. Eso se llenó de rojos y ¿saben por qué? Porque no todos estaban preparados para catar la cantidad de escena de adultos que yo sigo catando.
-¿Sigue viendo trabajos de esta especie?
-Sí. Y lamento decirles: todo el cine para adultos es comunista
-¿Por qué?
-Porque se ha llenado de estimulación anal y de negros y árabes. Y esa gente no tiene más que socialismo y pobreza para repartir. La más célebre espía, ustedes seguro han escuchado de ella, es esa dama oscura que conocen como Mia Khalifa; ella tiene ese apellido porque quiere instaurar un Kalifato universal. Islámico y Comunista son la misma cosa.
-Perdónennos ,pero creemos que, tal vez, usted está viendo cosas que no concuerdan con los hechos fácticos. Esa dualidad o división del mundo entre comunistas y capitalistas ya hace mucho quedó perimida.
-Veo en ustedes ya no dos pajeros sino dos guerrilleros que deben ser exterminados. Aunque no se preocupen, si no tienen capacidad de concentración, la paja para ustedes no significa catar sino matarse de a poquitos.
-Por favor, ahonde en esa diferencia. Entre hacerse la paja y catar
-Cuando usted cata, degusta de manera científica. Cuando usted se pajea, se disgusta de manera triste, sobre todo cuando acaba y la acción en el video ni siquiera ha empezado, en el video aún están hablando. Ustedes, los pajorros, se masturban con besos. Los catadores descubrimos ideologías con himeneos.
NUEVO MAPA DEL INFIERNO ARAUCANO: sobre CONSPIRADORES DEL ARAUCA
NUEVO MAPA DEL INFIERNO ARAUCANO
POR: Luis Cermeño.
La primera aproximación a la literatura del hombre llanero, en específico, el araucano, se podría decir sin temor a la verdad, proviene no de la escuela sino del rancho, la casa, o el hato, de manera acústica, a través del oído. Antes que aprender nombres de libros o autores, el araucano aprende canciones, y versos, y pasajes, y cantos de trabajo. Esta forma oral de transmisión de literatura adquirió toda su legitimidad cuando en el año 2016, la academia sueca le otorga el Nobel de Literatura a un cantautor popular como Bob Dylan[1].
Esta convergencia literaria-musical fue previamente observada por el poeta araucano Luis Caropresse en su ensayo: Música-Literatura en el Llano Oriental Colombiano[2]. Allí el autor, célebre en el mundo de la poesía, y autor del himno oficial del Guanía, suelta una sentencia que es ilustrativa de la situación narrativa en la región: “En síntesis, el joropo es la expresión musical y poética autóctona del mestizaje llanero.”[3] Inmediatamente, el autor se va lanza en ristre de las nuevas formas de escribir como la novela, el poema en verso libre, o los cuentos, a los que considera extranjerismos que obedecen a modas literarias.
Esta es una actitud que, a mi modo de ver, demuestra el conservadurismo de las posiciones culturales araucanas, hegemónicas, frente a las nuevas expresiones y formas de narrar el departamento. Esto puede también explicar la escasez de autores y libros en la región. Aparentemente no está bien visto, para el araucano tradicional, escribir algo que no pueda transformarse en una forma poética convencional como pueden ser la copla para ser cantada, o la décima y la glosa cuya finalidad sean la declamación. Por esta razón, es que el Parque de los Poetas en Arauca está lleno de cantautores y no existe ninguno que no se haya aventurado por los senderos del canto o la copla.
El libro CONSPIRADORES DEL ARAUCA es un registro valioso porque demuestra que sí existe una tradición de escritores que no solo compusieron canciones sino que se aventuraron en otras sendas literarias, o de investigación, que no necesariamente corresponden a una necesidad musical, sino también reflexiva, narrativa, crítica o imaginativa.
Desde 1896 se están escribiendo libros en Arauca, denunciando su abandono estatal, sus injusticias y su importancia geopolítica. Novelas costumbristas que resaltaron los valores de la gente y su talante, entre ellas la famosa Doña Bárbara de Rómulo Gallegos, que enfatizan la riqueza de las costumbres y tradiciones, y que tan pertinentemente se prepondera en esta obra, manifiestan que la llanura puede ser una manera de experimentar la dignidad universal.
Un cuento de navidad
Sabio para las mañas, el viejo de las llanuras dijo que la relación con su hijo era casi un orgasmo.
Cuando los orgasmos ocurrieron, él no sabía que de ellos se tratara. Apenas comenzaba diciembre, en los juegos que precedían la conmemoración de la natividad, él jugaba a la pajita en boca: el viejo, por ese entonces joven, aunque ya barbudo y calvo, le pedía a sus varoncitos cuyas bocas mudaban de dientes que lo pajearan con la boca. Una vez el ahora viejo sabio evacuaba, tomaba del mentón al hijo hincado, lo miraba a los ojos y le decía: ¡Mis aguinaldos!
Ahora, que el viejo ya viejo es, ve a aquellos diciembres que nunca volverán: sus hijos ya tienen hijos.
Y los hijos de sus hijos lo rodean, mientras él, sentado en su silla mecedora, les cuenta historias de guajibos que resguardan el último resquicio de los antepasados.
Episodios cotidianos. Por Francesco Vitola
Tarados histéricos
11 de diciembre, Barranquilla, Colombia. Desde el extremo norte de Sudamérica sigo el acto de instauración del nuevo presidente Argentino, reaccionarios de todo el mundo se han reunido a celebrar el triunfo de un tipejo desgreñado llamado Javier Milei. La ultraderecha internacional congregada para pactar la repartición del botín, el festín de la «casta» carroñera, en vivo y en directo. Aquella orgía de obtusos encorbatados contaba con la participación de sádicos violentos, depredadores de recursos naturales, negacionistas del calentamiento global y de los derechos humanos, enemigos de la vida y las libertades individuales, todos ellos histéricos y arbitrarios. Un nauseabundo espectáculo de homofóbicos recalcitrantes que se abrazaban cariñosamente mientras se sostenían la mirada.
En el atril, con la banda celeste cruzada en el pecho, el histérico de hace unas semanas lucía apocado, pálido, manso, incluso parecía haber sido trasquilado contra su voluntad, revelando una incipiente calvicie. El pueblo argentino no saldrá de la crisis, reveló su discurso inaugural, al final el ajuste no será para las élites, que seguirán sin pagar impuestos por sus grandes fortunas. Entre sus palabras, una extraña confesión, casi una promesa: la pobreza y la indigencia aumentarán. Lo dijo de pasada, sin emoción, bajando el tono de voz, pero fue quizás lo único cierto en su despliegue de demagogia. También confirmó el despido de funcionarios, a raíz de la eliminación de ministerios, según él innecesarios, como el que vela por el respeto de los derechos humano, lo que en Latinoamérica significa: leyes mordaza, espionaje a gran escala contra opositores, represión sangrienta en las calles, desapariciones forzadas, y sobre todo, impunidad judicial para los opresores. A continuación prometió eliminar todos los beneficios sociales ofrecidos por el Estado, la salud dejará de ser gratuita, y la educación se privatizará para poder reescribir la historia. En su discurso, el «no hay plata» se usó como un mantra con el que pretenderá justificar el autoritarismo que está por venir.
¿Cómo fue posible que los votantes se tragaran el cuento de la «motosierra para la casta»? No estamos ante el triunfo de la democracia, sino ante la mayor goleada sufrida por Argentina. Autogoleada, para más pesadumbre. Siendo un pueblo versado en fútbol sorprende que no hayan visto esa finta tan telegrafiada, quizás no creyeron que uno de los suyos fuese capaz de traicionarles —como si los neoliberales tuvieran otra patria que los paraísos fiscales—.
Ahora, siendo justos, el problema real no son los líderes descabellados, cínicos oportunistas por excelencia. El verdadero problema es la velocidad con que se multiplican los votantes incapaces de autocontrol o autocrítica, que en su lógica disparatada, arrastran taras —supersticiones, miedos, complejos—que les obligan a someterse al opresor que les ahorre el esfuerzo de pensar, basta con que les prometan poder seguir siendo obtusos, intolerantes y violentos. Por eso me pregunto si el auge de los reaccionarios no será más bien un síntoma del deterioro de la salud mental del hemisferio occidental, ¿estamos ante un caso clínico a gran escala, una histeria global, que como un virus volátil —gracias a las redes sociales y a la idiotez masificada— se ha propagado entre los grupos de población más propensos al fanatismo, a la falta de empatía, a la irracionalidad y el estancamiento intelectual? Este virus, esta histeria entre tarados, encuentra terreno fértil entre los obtusos que se niegan a evolucionar al ritmo de una sociedad cambiante. Entonces, si el problema es de inmadurez intelectual, de incapacidad crítica, de pereza mental, los negacionistas que encumbran histéricos intolerantes seguirán sin aprender nada, y Occidente continuará irremediablemente en su deriva hacia el despeñadero del fascismo.
Los antídotos: educación, empatía, solidaridad. Y manifestar la inconformidad en las calles. El absolutismo no debe sentirse cómodo con la victoria.